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Notas de prensa

    La fiscalidad actual perjudica la recuperación, frena el desarrollo empresarial y penaliza la creación de empleo

    En su último Informe de Coyuntura Económica y Laboral, La Confederación Española de Organizaciones Empresariales del Metal, CONFEMETAL, plantea las bases sobre las que ha de sustentarse la anunciada reforma fiscal que entrará en vigor a final de la legislatura, en 2015, y que debería centrarse en la reducción de la presión fiscal que soportan empresas y familias, en la suficiencia recaudatoria y en la lucha contra el fraude y, sobre todo, en el establecimiento de medidas que favorezcan la creación de empresas, su desarrollo y la cultura empresarial.

    Según CONFEMETAL los efectos devastadores sobre el empleo, la competitividad y el desarrollo empresarial de la profunda crisis económica que sufre España, se han visto agravados por una fiscalidad centrada casi en exclusiva en combatir el déficit público a través de un aumento de la carga fiscal que soportan empresas y familias, hasta límites difícilmente sostenibles.

    Esa fiscalidad, si bien está permitiendo reducir el déficit, ha supuesto de hecho un obstáculo para la recuperación, un freno para e ldesarrollo empresarial y una fuerte penalización a la creación de empleo, que la reforma debería corregir, en primer lugar reduciendo el volumen actual de gasto público estructural.

    El tejido productivo español ya ha sufrido medidas encaminadas a aumentar la recaudación como las subidas del IRPF, del Impuesto sobre Sociedades (mediante el despliegue de una serie de medidas que desvirtúan los elementos esenciales del Impuesto), del IVA (dañando el consumo y la reactivación económica), la supresión del derecho de las empresas a la aplicación de las bonificaciones por contratación; la elevación de0 por ciento de los costes del despido en las pymes de menos de veinticinco trabajadores, al suprimirse el pago de ocho días que venía haciendo el Fogasa, o el aumento del número de conceptos cotizables a la Seguridad Social.

    Y sin embargo, el nivel de lo recaudado ha quedado lejos de lo previsto, debido al adelgazamiento de las bases imponibles derivado del aumento del desempleo, a la contención y recorte de las retribuciones salariales, al deterioro de los beneficios empresariales y a la caída del consumo. Además, la subida de la carga fiscal, también puede haber contribuido a mantener y, posiblemente, a aumentar el fraude fiscal de una economía sumergida que se sitúa en torno al 25 por ciento del PIB.

    CONFEMETAL señala en su Informe que es necesaria, también, una simplificación tributaria y una coordinación de las políticas impositivas estatales y autonómicas, que evite la proliferación de tasas e impuestos que generan situaciones anticompetitivas y la ruptura de la unidad de mercado.

    Asimismo, debe establecerse un sistema de compensación tributaria mediante el cual las empresas puedan compensar sus créditos reconocidos contra cualquier Administración, contra los pagos a realizar por impuestos o cotizaciones a la Seguridad Social, evitando la situación frecuente e injusta de que empresas con créditos vencidos y no pagados por la Administración, tengan que satisfacer tributos y cotizaciones sociales.

    Ningún recorte de impuestos debería hacerse con cargo a un incremento del déficit presupuestario. La imprescindible rebaja impositiva debe acompañarse de un ensanchamiento de las bases imponibles, y de una adecuada y sencilla fiscalidad para las pymes, que constituyen más del 99,5 por ciento del tejido empresarial español.

    Por último, CONFEMETAL subraya que la reforma fiscal que España necesita requiere un amplio consenso político y social sin el que la efectividad de los cambios que se hagan estaría sujeta a avatares ajenos al verdadero interés general.

    24/04/2014